En las últimas semanas, las redes sociales se han llenado de mensajes alarmantes sobre la situación de los American Bully XL en el Reino Unido. A escasos días de que entre en vigor la decisión del gobierno británico de vetar esta raza canina, muchos de estos perros están siendo realojados en casas de acogida fuera del país.

A partir del 1 de febrero, esta la raza será ilegal en el país a causa de la medida adoptada por el ejecutivo del primer ministro Rishi Sunak. Este veto surgió como respuesta a una serie de ataques mortales protagonizados por esta raza en los últimos años.

En 2021, por ejemplo, un hombre perdió la vida en Walsall y un menor resultó gravemente herido en Birmingham tras ser atacados por estos caninos. Sin ir más lejos, esta semana, uno de estos canes atacó salvajemente a dos hombres en una finca en Escocia. El responsable del animal fue trasladado al hospital con heridas graves tras el ataque. 

La prohibición de esta raza no solo implica un veto a su comercialización y reproducción, sino que también plantea medidas drásticas para los dueños actuales. Aquellos que deseen conservar a sus American Bully XL deberán cumplir con exigencias rigurosas. Estas, incluyen el pago de una tasa de 105 euros, la contratación de un seguro especial, la esterilización de los animales y la obligatoriedad de llevarlos siempre con bozal y atados.

La alternativa para aquellos que no cumplan con estos requisitos es enfrentar multas o el decomiso de sus perros. Además, se ha generado una fuerte controversia en torno a la posibilidad de optar por la eutanasia como una solución a esta nueva normativa. De hecho el ejecutivo ha previsto una medida para subvencionar estos sacrificios.

La situación ha generado críticas tanto dentro como fuera del país, y ya han surgido varias iniciativas para encontrar casas de acogida o familias de adopción para los American Bully XL fuera de las fronteras británicas. La resistencia de algunos propietarios y defensores de la raza ha llevado a cuestionar la efectividad y ética de la medida adoptada por el gobierno.

Los American Bully XL son ilegales en Turquía y Emiratos Árabes Unidos. La raza también está restringida en algunos países, entre los que se encuentra la República de Irlanda. Además, cabe destacar que hay otras razas caninas que se encuentran bajo la Ley de Perros Peligrosos de Reino Unido, la cual vetacualquier perro que esté «peligrosamente fuera de control». Se trata de: Pit Bull Terrier, Tosa Inu japonés, Dogo Argentino, y Fila Brasileiro.

Con información de La Vanguardia

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