El presidente de EEUU, Joe Biden, parece haber hecho honor una vez más al apodo que le puso su predecesor, Donald Trump, que llama al jefe de la Casa Blanca «el dormilón Joe».
Durante una reunión con el primer ministro israelí, Naftali Bennett, Biden cruzó las manos, inclinó la cabeza y cerró los ojos. El primer ministro israelí se percató de ello y primero levantó un poco la voz para intentar captar su atención. Al no conseguirlo, dirigió su discurso al público.
Tras terminar su comparecencia, y tras reposar por unos siete segundos, Biden se espabiló y agradeció a Bennett sus palabras.
El comportamiento de Biden ha sido ampliamente discutido en las redes sociales. Los internautas coincidieron en que, efectivamente, el presidente estadounidense se había quedado dormido durante las conversaciones.
La Casa Blanca informó que ambos líderes se habían reunido para tratar las relaciones bilaterales y la seguridad en Oriente Medio.
Fuente: Agencias