La música tiene un impacto emocional y cognitivo, por lo que está íntimamente relacionada con el sistema nervioso y es capaz de activar recuerdos felices en el cerebro.
Dependiendo de la melodía, esta puede influir de manera positiva en el ser humano. La mayoría de las veces las personas buscan la música según su gusto e incluso su estado de ánimo.
Con la música es mucho mas fácil expresar sentimientos; si se está alegre, la opción claramente son esas melodías con ritmos alegres capaces de activar los centros neuronales del placer y por ende dar sensación de felicidad. Esta siempre estará relacionada con nuestras vidas, tanto así que puede liberar tensiones, emociones, relajarnos y evocar recuerdos.
Existen estudios realizados por científicos que aseguran que la música tiene el poder de modificar la forma como se siente la persona, lo que concluye que si se utiliza con fines terapéuticos será un gran aliado para mejorar el estado anímico.
Los géneros salsa, tecno, merengue, pop, rock, etc., ayudan a aumentar la energía corporal. Mientras los ritmos latinos dan una inyección de dopamina y adrenalina generando energía.
Para conseguir estados tranquilos, de inspiración y calma lo mejor es escuchar géneros instrumentales, clásica, lounge, jazz.
La melodía romántica es capaz de ayudar a segregar oxitocina en el cerebro, la hormona encargada de la felicidad.
Una armonía alegre siempre conectará con las emociones positivas, así como los recuerdos felices, por lo que muchas veces algunas de las melodías se convierten en parte de la vida. Y es que la música puede ser capaz de transmitir grandes sensaciones. Un ejemplo es que escuchar en vivo una banda sonora genera felicidad o ver y escuchar el sonido de alguna película de acción puede dar una carga emotiva.
MT | ElPeriodiquito | 2001