Semanas atrás nuestro portal publicó un trabajo de investigación sobre a la red de extorsión de la periodista de El Nacional, Carola Briceño, y de su hija Bárbara de Jesús Briceño en Venezuela, a través de una empresa fantasma de nombre Workamedia.

Tras la publicación, hemos recibido mucha información nueva sobre la trayectoria oscura de esta cuestionada periodista, que no sólo ha mentido sobre su formación académica, sino que se ha ganado la desconfianza de instituciones como CEDICE Libertad, The Washington University y portales digitales.

Dos víctimas piden justicia. Se trata nada menos que de Iván Carratú Molina, ex jefe de la Casa Militar del ex presidente de Venezuela Carlos Andrés Pérez; junto con la activista política Maritza Agena, Carratú denunció a esta periodista ante la Fiscalía de Colombia por calumnia e injuria.


Briceño involucró a ambos personajes en varios trabajos publicados en el portal Panampost, en el robo de recursos de la ayuda humanitaria por parte del gobierno interino de Juan el 23 de febrero del 2019.

La primera en apartarse fue la ONG CEDICE Libertad, donde trabaja su hija Bárbara de Jesús Briceño, y donde supuestamente la periodista habría laborado también; incluso hacía uso del logo de esta ONG en sus redes, hasta que la misma organización le exigió quitarlo de sus perfiles en Twitter y Facebook.

Briceño aseguraba en ambos perfiles haberse diplomado en la George Washington University en el año 2017; sin embargo, en su resumen curricular en LinkedIn no aparece dicha titulación.

En su perfil profesional de Panampost también aseguraba ambas cosas, pero no hay nada que pruebe estos estudios, ni experiencia.

Se sabe que Briceño aparecía como co-fundadora y editora del portal Latampost hasta el año 2021, luego de que sus difamaciones en injurias contra opositores venezolanos llevaron a la directiva a sacarla de su plantilla.

Carola también trabajó (y fue despedida) en el canal del régimen Telesur, sin contar su paso por el Min. de Agricultura y Cría, Infraestructura, Últimas Noticias y Aporrea. ¿Será que nadie la quiere?.

MT/ LB

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