En Missouri, EEUU, un distrito escolar restableció, con los padres que así lo consideren, usar como castigo las nalgadas como una opción disciplinaria en las escuelas.
En tal sentido, la superintendente del Distrito Escolar de Cassville, la doctora Merlyn Johnson, indicó que se realizó una encuesta que se envió al personal, los estudiantes y los padres en mayo.
“Una de las sugerencias fue la preocupación por la disciplina de los estudiantes. Entonces, reaccionamos implementando varias estrategias diferentes, siendo el castigo corporal una de ellas”, explicó Johnson.
Además, añadió que “esta es una opción exclusiva para los padres. Es algo que no anticipamos usar con frecuencia”.
El 16 de junio de este año, adoptaron esta política del castigo corporal, que lo define como “el uso de la fuerza física como método para corregir el comportamiento de los estudiantes”.
Además, agrega que se aplicará “como medida de corrección o de mantenimiento de la disciplina y el orden en las escuelas”.
La madre Kimberly Richardson, considera que “una suspensión de la escuela estaría bien”, y cree que el distrito está siendo retrógrado.
También se mostró preocupada si un niño resultara lastimado si el castigo corporal es “demasiado severo”. Sin embargo, manifestó que cada padre y madre deben determinar qué es lo mejor para su familia.
Por su parte, Dylan Burns, tiene un niño en edad preescolar y otro en quinto grado en dicho distrito escolar, y no cree que sea para tanto. Explicó que sus hijos le aseguraron que nunca se meterán en problemas tan graves como para que los golpeen.
La medida vuelve después de que en 2001 fuera desterrada. En el país norteamerciano, esta práctica es permitida en 19 estados y es avalada por la Corte Suprema, que deja abierta la decisión a cada estado.
Según The Washington Post, cifras de la Oficina de Derechos Civiles del Departamento de Educación estadounidense muestran que entre 2017 y 2018 más de 69.000 niños y adolescentes fueron golpeados en la escuela.
(MT/AFP)
