Los migrantes venezolanos sufren por las fuertes lluvias en el extranjero. Una familia venezolana fue arrastrada por la crecida de una quebrada en la localidad de Teorama en Norte de Santender, Colombia.

La pareja venezolana y sus dos niños llegaban de Casigua El Cubo, estado Zulia, al corregimiento La Cecilia para trabajar en una finca donde les ofrecieron trabajo cuando fueron arrastrados por la quebrada.

Los jóvenes padres lograron salvarse, porque tuvieron la oportunidad de sujetarse a unas ramas, pero la fuerza de las aguas les arrebató a sus pequeños de 1 y 3 años de edad, de esta quebrada se sabe hace parte del Río Catatumbo y sus aguas desembocan en el lago de Maracaibo, en Venezuela.

Según el alcalde de Teorama, Robinson Salazar Benítez, la quebrada Las Ánimas conecta con el río Catatumbo y el hecho ocurrió a las 8:00 pm aproximadamente. Sostuvo que desde la administración municipal han tendido la mano y toda la solidaridad a esta familia, para brindarle acompañamiento.

Desde el corregimiento San Pablo se coordina el rescate de los menores de edad y de la motocicleta arrastrados por la fuerza de la corriente.

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Los esfuerzos de las autoridades civiles y de los campesinos de la región por tratar de dar con el paradero de los niños han sido en vano por la dificultad del terreno, las constantes lluvias que siguen cayendo en la zona y por la condición del cauce del río que no tiene orillas según explica un lugareño.

“El río tiene un caudal bastante elevado, aquí por grupos de WhatsApp de las diferentes juntas de acción comunal, se ha estado moviendo la gente los que viven cerca del río, pero es prácticamente imposible encontrar fácil a los niños,  porque el río no tiene orillas, la única esperanza es que el caudal reduzca”, manifestó un habitante del lugar.

De igual forma, este labriego ha dicho que “de no reducir el caudal hay varias opciones, que como son niños no los entregue el río como llaman acá, no exista la posibilidad de sacarlos, lo otro es que aparezcan en la zona donde el río se aplana que es en el sector de la Gabarra”, indicó.

María Milagros Álvarez Rangel, madre de los niños, tiene la esperanza y la fe, que al igual que su nombre, ocurra un “milagro” y sus dos pequeños se encuentren atrapados en alguna parte y estén con vida.

“Lo que podemos decir es que nos ayuden por favor en todo lo que sea posible, como sea yo me los tengo que llevar de aquí, yo tengo fe que están por ahí, en las raíces de un palo, en una mata, con vida; ¡Por favor ayúdenos! ¡Por favor!”, manifestó la angustiada madre en medio de las lágrimas.

Fuente: Ululeo

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