Este domingo, más de 20 personas murieron como resultado de enfrentamientos entre disidencias de las FARC y miembros del ELN en el departamento colombiano de Arauca, limítrofe con Venezuela.
Los actos violentos que serían producto de la ruptura de un pacto entre los dos grupos armados se habrían registrado en los municipios Arauquita, Tame, Fortul y Saravena.
El Gobernador encargado del departamento, Alejandro Navas Ramos, dijo que el total de víctimas asciende a 22 personas, mientras que el personero de Tame, Juan Carlos Villate Villate Camargo, aseguró que son 24, según reseñó W Radio.
Caracol Radio señala que se han reportado acciones armadas tanto en territorio colombiano como en zonas fronterizas con Venezuela.
Villate Camargo se dirigió en un comunicado al ELN, las FARC y los grupos armados organizados (GAO) e instó a «respetar la vida de la población civil». «Requerimos con urgencia la creación de corredores humanitarios seguros… para atender a más de 2.000 personas que han manifestado su voluntad de salir del territorio para proteger sus vidas y la de sus familias», enfatizó.
Según el secretario de gobierno del departamento colombiano de Arauca, Édgar Guzmán, la muerte de un dirigente del ELN es la causa de los recientes enfrentamientos.
Entre tanto la Oficina en Colombia de la Alta Comisionada de la ONU para los DD.HH. llamó a proteger a la población civil y a activar los planes de contingencia para estos casos.
La Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia de la Organización de Estados Americanos (MAPP/OEA) también expresó su rechazo a la tragedia y reiteró la necesidad de que los grupos armados al margen de la ley respeten el Derecho Internacional Humanitario y los invita a «dejar la población civil por fuera del conflicto».
MT/EL NACIONAL