El ministro ruso de Defensa, Serguéi Shoigú, «informó al comandante supremo de las Fuerzas Armadas, Vladímir Putin» este domingo 3 de julio de la «liberación» de la región de Lugansk, en el Donbás ucraniano, según un comunicado de su departamento difundido en Telegram.
Shoigú dijo que, «como resultado de operaciones militares exitosas, las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa, junto con unidades de la Milicia Popular de la República Popular de Lugansk, han establecido el control total sobre la ciudad de Lisichansk y un número de localidades cercanos (…)», dijo Defensa.
Las fuerzas rusas y sus aliados separatistas tomaron la última ciudad en la región de Luhansk en el este de Ucrania. «El control total de Lisichansk y de otras localidades cercanas, entre las que destacan Belogorovka, Novodrujesk, Maloriazantsevo y Belaya Gora», detalló el comunicado.
Unos minutos antes de este anuncio, el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov, había informado que los combates seguían en Lisichansk y que las fuerzas ucranianas estaban «totalmente» rodeadas.
El gobernador ucraniano de la región de Lugansk, Serguei Gaidai, informó en Telegram que los rusos estaban reforzando sus posiciones en la zona de Lisichansk.
Lugansk es una de las dos regiones que forman Donbás, la parte oriental de Ucrania donde comenzó el conflicto entre Ucrania y los separatistas respaldados por Rusia en 2014. El área se ha convertido en el centro clave de la ambición militar de Putin después de que sus tropas no lograron tomar el control de Kyiv a principios de este año.
La caída de Lisichansk acercaría a Rusia de lograr el objetivo de apoderarse de Donbás.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, dijo que las ciudades de la región de Lugansk eran «el epicentro» de las hostilidades. En su discurso nocturno del sábado, reconoció que más de 2600 ciudades y pueblos ucranianos estaban bajo control ruso.
Por su parte, las fuerzas de Ucrania señalaron que destruyeron una base militar rusa en Melitopol, en el sur, la madrugada del domingo, lo que confirmó el alcalde exiliado de la ciudad, Ivan Fedorov, en un discurso en video.
(MT/DW/CNN)