Todo empezó en abril de 2017 cuando la revista alemana Der Spiegel reportó que la modelo norteamericana Kathryn Mayorga acusaba a Cristiano Ronaldo de violarla en junio de 2009 en la habitación de un hotel en Las Vegas.

En aquel entonces, el abogado del futbolista, Christian Schertz, expresó en un comunicado que la nota era «inadmisible» y que podrían demandar por una retribución legal para su cliente por tratarse de una acusación «flagrantemente ilegal».

El abogado de la modelo, L. M. Stovall, dijo ese año que Ronaldo y Mayorga suscribieron un acuerdo de confidencialidad, fuera de la corte, en el que su clienta se comprometió a no hablar del tema, y por ello Ronaldo le pagó $ 375,000.

La revista Der Spiegel aseguró en su momento que solicitó información, repetidamente, a representantes y abogados de Ronaldo antes de publicar las declaraciones de la modelo, pero no hubo respuestas.

Cinco años después, la revista alemana retoma el caso anunciando que la modelo demandó el jueves 17 de febrero de este año al futbolista en una corte de distrito en Nevada, y busca anular el acuerdo de confidencialidad alegando que fue obligada a firmarlo para mantener silencio.

En la demanda, Mayorga afirma que Ronaldo la conoció en un club nocturno de Las Vegas en junio de 2009. La noche siguiente el futbolista invitó a un grupo de personas, incluyéndola a ella, a la suite del hotel donde se hospedaba.

La chica contó que esa noche Ronaldo le pidió tener sexo en un baño mientras se colocaba ropa para entrar a un jacuzzi. Luego el jugador la llevó a una habitación y la violó, dice la demanda con la que la dama exige al jugador $78 millones.

Son $25 millones por el “dolor y sufrimiento”, otros $25 millones por los “daños mentales a futuro” y otros $25 millones por daños punitivos, incluyendo honorarios y otros gastos. Se trata de $78 millones, lo equivalente a dos años de salario del futbolista portugués.

Esta semana The Sun reveló que los abogados de Ronaldo amenazaron a la modelo para que dejara de hablar al respecto. Advirtieron a la mujer que sería víctima de «exposición pública y humillación».

(MT/ RT)

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