El exalcalde metropolitano Antonio Ledezma advirtió que Juan Guaidó, reconocido como presidente interino de Venezuela por una parte de la comunidad internacional, podría ser considerado como un «usurpador» si reconoce oficialmente a la administración de Nicolás Maduro como jefe de Estado.

Ledezma manifestó en entrevista con El Nacional que es necesario tener una estrategia con una ruta «que no dé lugar a dudas ni a zigzagueos» y dijo que las negociaciones deben ser usadas para definir mecanismos que permitan alcanzar elecciones libres; cosa que se podrá hacer cuando «desaparezca o cese en el control de las instituciones venezolanas».

A su juicio, el hecho de que Guaidó dejara a un lado el «mantra» que lo caracterizó en 2019 y escoger la negociación como herramienta, sería visto por Maduro como un «signo de debilidad que tratará de usar sin el más mínimo escrúpulo».

De igual forma, cree que es una «carta marcada» porque plantea ir a un acuerdo cuando ya otros factores opositores ya han ido a hacer lo mismo con el Ejecutivo.

Cree que las iniciativas de diálogo que se han celebrado en los últimos años han dado tiempo a quienes ostentan el poder y que los encuentros en Barbados representan un hito «insólito» porque la posición de Guaidó «dio un giro brusco una vez que desde enero le dijo a la gente que saliera a las calles a luchar por el cese de la usurpación y a comienzos de mayo de 2019 las mandó a congelarse en sus casas».

Ledezma no considera que la administración de Maduro respete cualquier acuerdo que se llegue en mesas de negociación «si no hay una verdadera amenaza creíble que los haga entrar en razón». Reconoció que la «misión» que le fue encomendada a Guaidó «no ha sido lograda» porque «se dejó atrapar por un grupo que secuestró la conducción política».

Este dirigente político fue detenido en 2017 por organismos de seguridad venezolanos escudados en que violó las condiciones del beneficio de casa por cárcel del que gozaba desde abril de 2015, por motivos de salud. Según alega el régimen, participó en un golpe de Estado que incluía el bombardeo de instituciones gubernamentales.

(MT/TC)

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