Este miércoles se celebra por segunda vez la memoria litúrgica del beato José Gregorio Hernández. Cada 26 de octubre es día de fiesta por el nacimiento del “Médico de los Pobres”, hace 158 años; y durante la Ceremonia de su Beatificación, el 30 de abril de 2021, fue dispuesta la celebración de su memoria litúrgica en la misma fecha.

Nacido en 1864 en Los Andes, conquistó al pueblo por su benevolencia y generosidad. Su beatificación fue aprobada por el papa Francisco luego de verificar el milagro concedido en Guárico a la niña Yaxury Solórzano, a quien los médicos no daban esperanzas de vida tras recibir un disparo en la cabeza.

Vocación religiosa: Sus biógrafos aseguran que desde pequeño manifestó su cercanía con Dios. Cuando comenzó su educación media, tras haberse trasladado desde su pueblo -Inostú- a Caracas, manifestó al director del internado en el que estudiaría, Guillermo Tell Villegas, su deseo de ser «un buen cristiano».

Sus amores: Nunca se casó, pero en su juventud manifestó interés por varias muchachas. Su primer amor lo tuvo a los 15 años cuando conoció a María Gutiérrez Azpúrua, quien no le correspondió, pero también se interesó en unas chicas de apellido Elizondo, según carta enviada a su amigo Santos Dominici.

Aporte a la medicina: Aunque quiso estudiar leyes, se preparó para ser médico por recomendación de su padre y fue becado para especializarse en Francia. El galeno fue el encargado de fundar el primer laboratorio del país.

El médico de los pobres: Dedicaba una hora diaria a atender a los enfermos sin recursos económicos y les regalaba dinero para sus tratamientos. Comenzó a conocerse como el «médico de los pobres», aun cuando fue nombrado como el galeno del presidente Juan Vicente Gómez.

Fallecimiento: Se afirma que ofreció su vida a cambio del fin de la primera guerra mundial, cuyo tratado se firmó un día antes de su muerte, el 28 de junio de 1919. Miles de compatriotas acudieron a su funeral y cuando iba a ser trasladado al cementerio comenzaron a gritar «el doctor Hernández es nuestro» para impedir que fuera llevado en una carroza y cargarlo en hombros.

MT / EFE / CEV

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *